Los 132 y la Primavera Mexicana

Recuerdo que en 1986 tenía 18 años, era el Mundial de Fútbol en México y cada vez que la selección ganaba nos íbamos al Ángel de la Independencia a celebrar y gritar: “Paloma, Cordero, tu esposo es un culero¨ (Haciendo referencia al presidente de la república en turno, Miguel de la Madrid).

Esos gritos más de que protesta, eran parte de la “fiesta” porque la verdad, no había mucho qué hace por las grandes devaluaciones o por la inflación que sufría el país. Además, era el mundial y pasábamos a cuartos de final... yo me sentía muy rebelde.

La juventud es una enfermedad que se cura con el tiempo (eso dicen) y me viene a la memoria los movimientos y la huelga de la UNAM con el famoso Mosh y Carlos Imaz. Muchos de ustedes recordaran en qué terminó ese movimiento.

Ahora, el movimiento de los 132, es el movimiento del 2012. Estudiantes de la Universidad privada Iberoamericana (de gran prestigio y alto costo) repudiaron la visita del candidato del PRI, Enrique Peña Nieto, a sus instalaciones en Santa Fe. Este movimiento ha ido tomando fuerza, sobretodo al usar las Redes Sociales y ya en el extranjero lo ven como la “Primavera Mexicana” (Haciendo referencia al movimiento político/social de la Primavera Arabe).

En Túnez y Egipto estaban enfocados en derrocar al gobierno, generando mucha violencia. Aquí las protestas no son contra el gobierno, sino contra un candidato y los medios de comunicación, en especial Televisa. En Ambos movimientos primaverales, las redes sociales han sido el principal medio de comunicación y expresión.

El 23 de mayo, se realizó una protesta a nivel nacional. En la capital de México, la marcha fue de “La Estela de Luz” al “Ángel de la Independencia¨ (Pobre Ángel todo lo que ha soportado) convocada a través de Facebook y Twitter con los hashtags #Yosoy132 y #Marcha132, llegando obviamente a TT (Trending Topic) en Twitter.

Se dice que el movimiento no es de ningún partido político, aunque ayer hubo un discurso de Paco Ignacio Taibo, fiel seguidor de la Izquierda y fan de López Obrador, y que no está a favor ni en contra de ningún candidato, excepto de Enrique Peña Nieto.

Durante la manifestación, las exigencias (y digo exigencias porque así se expresaban) eran:

• Exigimos tiempos equitativos para todos los candidatos en los medios de comunicación
• Exigimos la “instalación” de un código de ética y un ombudsman en los medios
• Exigimos someter a concurso las producciones  para los canales públicos en las escuelas de comunicación
• Exigimos debates entre estudiantes y las demandas con los medios
• Exigimos que el acceso a Internet sea un derecho establecido en la constitución.
• Exigimos la transmisión nacional de los debates presidenciales.
• Exigimos además de equidad social, que no haya pobres, justicia, bla, bla
• Y su nieve... de limón

En general, las exigencias se me hacen muy vagas. Por ejemplo: la transmisión del debate es y ha sido a nivel nacional. Será que ellos fueron los pocos que sí vieron el fútbol aquel día. El acceso a internet, pues si está bien pero creo que hay otras prioridades o ¿la idea es que vayas a “Topolobampo” el chico y te conectes on line aunque no haya agua o luz? En todo caso me gustaría proponer que todos tuviéramos iPhone en la constitución. En serio, los costos en Internet en México son caros y la telefonía más, mejor protestar por eso!

Las Televisoras no imponen candidatos, tu voto si.

Durante su recorrido ordenado, aprovecharon para manifestarse su inconformidad con el contenido editorial que se produce en Televisa Chapultepec. En ese momento, los hashtags #nomasTelevisa y #Tercergrado se unieron al Twitter. Quejas contra la televisora llovieron en el micro blog. Lo curioso era recibir esos comentarios de gente que disfruta los programas de entretenimiento como las telenovelas y los “Realities Shows”... ¿dónde está la congruencia?.

Los jóvenes manifestantes querían impedir que el candidato llegará a esta cadena de televisión y que fuera entrevistado (lo malo es que no cuidaron el helipuerto). Pasaba el tiempo y como que se fueron aburriendo porque media hora antes del inicio del programa, ya se habían ido. Seguramente su mamá los llamó a bañarse o a cenar porque ¡se fueron! Valiente protesta.

Mientras en twitter: “Peña Nieto, explica lo de Atenco”. ¿Por qué no le exigieron eso antes o si lo hicieron por qué no con más protestas? “No vean “Tercer Grado”, no estamos en contra pero no vean las propuestas del candidato del PRI” Bueno, fue tanto el ruido que ¨Tercer Grado¨ llegó, junto con las cuentas de los periodistas, a ser las más populares en México, además de duplicar el rating del programa noticiosos llegando a 9.3 puntos.

Conclusión:

No estoy en contra del movimiento. Celebro que los jóvenes que iniciaron el movimiento y que no vivieron del PRI de Zedillo para atrás, tengan información suficiente para querer evitar que este partido corrupto llegue al poder. Celebro que todo fue con calma, sin violencia como nos tienen acostumbrados los Perredistas. Celebro que le exigen a Televisa (empresa donde trabajo) mayor calidad y parcialidad en su contenido editorial y celebro más que Televisa reaccione al respecto. Lo que no me queda claro es el fondo del movimiento, a qué candidato beneficia, qué hay detrás.

Jóvenes del movimiento, la mejor manera  de llegar a una democracia como la que todos anhelamos, es que nos informemos de las propuestas y actuar de los candidatos. Crear nuestro propio criterio y no votar por Peña Nieto si no es el candidato que te gusta. No se trata de imponer, se trata de informar libremente. 

Tengo la capacidad y responsabilidad suficiente para informarme y decidir. No es necesario que un grupo quiera “abrirme los ojos” con manifestaciones y exigencias vagas. Como mayores de edad y votantes amateurs, tienen y tenemos la obligación de informarnos y escuchar todas las propuestas. Si el candidato que gane por mayoría no fue por el que votamos, trabajemos con él, no en contra de él... y si no funciona, ahora sí, exigir.